Vox es el único partido que niega a venderse al adoctrinamiento ideológico y al progresismo globalista respresentado en la actualidad con la Agenda 2030. Por ello ha logrado que el Parlamento de Cantabria no se adhiera a la Declaración de la Agenda 2030 propuesta por el PSOE.
Los socialistas se han quedado sin argumentos a la hora de criticar a Vox por no lograr más adoctrinamiento y han calificado a la formación de “machista” y “ultraderechista”.
La portavoz parlamentaria socialista Noelia Cobo ha señalado que “Vox evita la pretensión de eliminar el compromiso de incorporar en las políticas y en la práctica diaria, el enfoque de derechos, la equidad de género y empoderamiento de las mujeres, la promoción de la diversidad y la sostenibilidad ambiental”.
Para la diputada socialista, esta actitud pone de manifiesto el “rechazo frontal de la extrema derecha” a cualquier iniciativa en pro de la igualdad de género una política que en su opinión Vox lleva al extremo de promover incluso el “negacionismo de la violencia de género”. Es decir, la agenda progresista.